Indígnate papel de los medios de información en Colombia

En medio de una guerra sucia que caracteriza las elecciones en Colombia, los medios de información han sido los principales protagonistas en fijar una controversia y un escenario de confusión, toda vez que intensifican ataque tras ataque, ofensa tras ofensa, blasfemia tras blasfemia.
Los medios, en vez de asumir distancia entre la pugna de los candidatos y las posturas de izquierda, derecha y centro deberían preocuparse en informar con veracidad los hechos del país y de lo que acontece en época de campaña, pero sin asumir posturas políticas que enferman a los ciudadanos.
Ya lo anunció Juan Gossain, en entrevista con Vicky Dávila (de quien hay mucho de qué hablar), el periodismo actual está asumiendo su responsabilidad peor que antes, tomando posiciones indignantes que no se acercan a la construcción social y ciudadana ni ayudan a clarificar los planes de gobierno de cada candidato. También afectan la posible firma de paz entre el gobierno y las Farc.

Se juega con campañas que utilizan como estrategia la confusión para así persuadir, confundir y manipular a los electores. Los medios y algunos periodistas, en este escenario, vulneran los principios básicos del periodismo y lo confunden con el espectáculo y la opinión. Además, que vulneran el derecho a informar y ser informado veraz e imparcialmente que se consagra en el Art. 20 de la Constitución Colombiana. 
En este contexto, se puede aludir que los medios junto con gran parte del periodismo en Colombia (sin incluir algunas alternativas de resistencia al periodismo consumista) no asumen una responsabilidad que responda a las necesidades informativas que necesitan los ciudadanos, pues están encriptados en el raiting y la publicidad que la desinformación les genera. 
Por Tío Pepe
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